Imagen de encabezado de Max van den Oetelaar
Es difícil ignorar la reciente explosión de titulares en los medios de comunicación que atribuyen las condiciones climáticas extremas al cambio climático. La nueva palabra de moda es crisis climática y vende. Como resultado, recibimos constantemente mensajes de que estamos bajo una amenaza inminente.
Con titulares sensacionalistas que evocan pánico y miedo, los medios de comunicación y las redes sociales están paralizando a muchos con ansiedad climática. Pero lo que necesitamos ahora es un pensamiento lógico e inteligente y optimismo climático.
NUESTRO MUNDO DINÁMICO
El cambio climático se refiere a los cambios de temperatura en el sistema climático de la Tierra. La Tierra no es un objeto estable, es un cuerpo vivo dinámico y durante milenios el clima de la Tierra ha pasado por muchos ciclos de calentamiento y enfriamiento.
Por el momento, estamos en un ciclo natural de calentamiento. El problema es que las temperaturas medias están aumentando ligeramente más rápido de lo que esperan los científicos, y este aumento excesivo se debe a la actividad humana.
Nuestra dependencia de los combustibles fósiles como el petróleo, el carbón y el gas natural ha permitido grandes avances en el desarrollo en el mundo y ha sacado a más personas de la pobreza que cualquier otra cosa.
Sin embargo, al mismo tiempo, las emisiones de gases de efecto invernadero, como el dióxido de carbono, que se liberan al quemar combustibles fósiles, suponen una carga importante para la Madre Tierra.
En última instancia, debemos reemplazar nuestra dependencia de los combustibles fósiles con opciones más ecológicas y al mismo tiempo permitir que las personas salgan de la pobreza.
El problema es que si queremos reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, necesitamos tecnología innovadora y avances de ingeniería en la ciencia que reemplacen nuestra necesidad de combustibles fósiles.
El cambio climático es un tema complicado y lleno de matices, y hay mucho en juego. En nuestras decisiones, tenemos que equilibrar la supervivencia de las personas que viven hoy con la supervivencia de las generaciones futuras en las próximas décadas. Es una conversación compleja que no se presta bien a los titulares de los medios porque la complejidad no vende; Los grandes titulares sí lo hacen.
TITULARES SENSACIONALES AFECTAN NUESTRA SALUD MENTAL
Lamentablemente, hoy en día, la feroz competencia mediática exige titulares que llamen la atención e historias impactantes de pesimismo. Estas historias suelen ser engañosas y no reflejan una imagen precisa de la situación. También se producen a expensas de conversaciones profundas, matizadas y complejas sobre ciencia, investigación, innovación y acción.
Entonces terminamos con una narrativa de crisis climática. Una narrativa engañosa que nos lleva a creer que la catástrofe está a la vuelta de la esquina y convierte a los humanos en parásitos cancerosos y tóxicos. Es una historia unilateral que causa pánico, miedo, culpa y ansiedad.
ANSIEDAD CLIMÁTICA
La ansiedad climática es una respuesta emocional a la información sobre el calentamiento global. Este estado elevado de ansiedad, también conocido como ecoansiedad, se asocia con sentimientos de estrés, pena, culpa, vergüenza, impotencia, fatalidad y desesperación.
No sorprende que la ansiedad climática afecte desproporcionadamente a quienes ya están viendo los efectos de nuestro clima cambiante, como los residentes de las islas bajas del Pacífico y Filipinas.
Pero un estudio reciente mostró que el 69% de los estadounidenses encuestados informaron que están al menos "algo preocupados" por el calentamiento global.
Sin embargo, son las generaciones más jóvenes las que sufren la ansiedad climática. De quienes interactúan con contenido relacionado con el clima en las redes sociales, el 77% informa sentir ansiedad climática después de la exposición a los medios.
¿DEBEMOS PREOCUPARNOS POR EL CAMBIO CLIMÁTICO?
Si bien el cambio climático es algo que debemos tomar en serio, Bjørn Lomborg, estadístico y autor de Falsa alarma: cómo el pánico por el cambio climático nos cuesta billones, perjudica a los pobres y no logra arreglar el planeta, es optimista.
De hecho, sugiere que deberíamos estar mucho más preocupados si el cambio climático fuera en la dirección opuesta. Lomborg dice que no podríamos sobrevivir a que el planeta se enfríe tan bien como podemos hacer frente a su calentamiento.
Lomborg, un ambientalista de larga data anunciado como una de las cincuenta personas que podrían salvar el planeta, aboga por abordar el cambio climático con ingenio, optimismo y cabeza fría. Señala que los seres humanos solucionamos problemas y cita nuestra capacidad de ingeniería para recuperar tierras como solo una solución para salvar a las ciudades del aumento del nivel del mar.
Si bien el cambio climático es una preocupación y necesitamos actuar y adaptarnos, otros problemas globales como el hambre y la contaminación del agua siguen representando un peligro inminente para las vidas de millones.
POR QUÉ LA ANSIEDAD CLIMÁTICA ES PERJUDICIAL
Sabemos que los niveles elevados de ansiedad durante períodos prolongados tienen un efecto perjudicial en nuestra salud mental. La ansiedad es una respuesta natural a la amenaza percibida y nos hace luchar, huir o congelarnos. Pero nuestros cuerpos sólo están diseñados para estar en este estado durante cortos períodos de tiempo. Vivir perpetuamente en este estado es perjudicial tanto para nuestro cuerpo físico como para nuestra salud mental.
Es más, cuando estamos en este estado tomamos decisiones irracionales porque perdemos nuestra capacidad de pensar críticamente y encontrar soluciones creativas.
A Sarah Jacquette Ray, autora de Una guía práctica sobre la ansiedad climática, le preocupa que los jóvenes estén tan ansiosos por el cambio climático que estén dispuestos a renunciar a la democracia y los derechos humanos para combatir el calentamiento global. Este es un ejemplo clásico de ansiedad climática que nos lleva a tomar decisiones irracionales.
Afrontar el cambio climático con una mentalidad más sólida y empoderada
Corremos el riesgo de tomar malas decisiones si somos demasiado entusiastas en la lucha contra el cambio climático sólo para aliviar nuestra ansiedad climática. Debemos cambiar nuestra forma de pensar adoptando una perspectiva más equilibrada y lógica sobre las cuestiones climáticas.
OPTIMISMO CLIMÁTICO
El optimismo climático es sólo eso. El optimismo climático nos pide que echemos una nueva mirada a lo que está sucediendo con curiosidad, entusiasmo, conciencia, esperanza y coraje. Nos pide que no veamos a la humanidad como un flagelo canceroso de la tierra sino como los innovadores creativos que somos.
Tampoco es una negación del cambio climático. Se trata de ser racionales y lúcidos para que podamos enfrentar estos desafíos de manera frontal, crítica y creativa.
El optimismo climático se trata de creer en la humanidad. Y reconociendo que los seres humanos son creativos por esencia y capaces de afrontar cada desafío con soluciones innovadoras.
Entonces, ¿cómo pasamos de la ansiedad climática al optimismo climático?
Primero, debemos tomar esa decisión. Tenemos que querer pasar de una mentalidad de ansiedad a una de positividad, esperanza y coraje. Y tenemos que hacer un esfuerzo para lograrlo. Y eso puede resultar difícil cuando estamos paralizados por el miedo y la ansiedad.
Las noticias y los medios juegan un papel importante en la inducción de sentimientos de ansiedad. Necesitamos reemplazar las historias sensacionalistas de devastación de los medios con datos reales y ciencia porque ambas cosas simplemente no cuadran. Sí, el cambio climático es real y tiene un impacto negativo, pero la devastación es muy poco probable y se espera que aumente el bienestar humano. Este artículo le ayudará a aliviar su ansiedad y a aumentar su optimismo para empezar.
Sumergirnos en contenido que destaca los avances tecnológicos innovadores, como los increíbles tejidos sostenibles utilizados en Koraru, nos ayuda a mantenernos optimistas. The Climate Optimist, una revista mensual, le brindará una dosis regular de optimismo y lo mantendrá actualizado sobre innovación, progreso y acción climática.
Anne Therese Gennari, autora de The Climate Optimist Handbook, nos ofrece cuatro pilares para pasar de la ansiedad climática al optimismo climático; Elegir el cambio, lidiar con la conciencia, crear optimismo y convertirse en líderes. Su hermoso enfoque nos anima a sanarnos a nosotros mismos para poder sanar el mundo. Fomenta la resiliencia emocional, el cambio, la acción, el liderazgo y el optimismo.
ELIGE OPTIMISMO CLIMÁTICO Y SÉ PARTE DE LA SOLUCIÓN
Desde un lugar de ansiedad climática, estamos congelados e incapaces de pensar críticamente o encontrar soluciones creativas para combatir el cambio climático. Pero desde un lugar de optimismo climático, podemos adaptarnos a nuestro entorno cambiante. Podemos realizar los cambios necesarios, crear las soluciones necesarias y diseñar los avances tecnológicos y de ingeniería necesarios para llevar a la humanidad a través de esto y hacia el futuro.
Escrito por Kirsti Formoso - Redactora de bienestar de Koraru
Kirsti Formoso es escritora e investigadora sobre bienestar. Le apasiona la salud y el bienestar integral. Tiene más de 30 años de conocimiento experiencial en desarrollo personal y espiritual, y una Maestría en Ciencias en Conciencia, Espiritualidad y Psicología Transpersonal. También es revisora de dos revistas científicas especializadas en Psicología Transpersonal. Cuando no está escribiendo, se la puede encontrar trabajando en su huerto, caminando por las montañas y respirando todas las maravillas que la naturaleza tiene para ofrecer.